Cuando nos mencionan galletas Ducales pensamos en su magia, en los momentos de felicidad que siempre nos regala y, claro, en las múltiples preparaciones cargadas de amor que podemos realizar con este ingrediente del toque secreto y que todo Ducalover ama.
Las galletas Ducales se pueden disfrutar sin ningún acompañante, su mágico sabor es suficiente para hacer feliz a cualquier persona. Sin embargo, también se pueden disfrutar con arequipe o queso crema, junto a un chocolate caliente o un café oscuro y cargado.
Aunque claro, también son la base principal de un postre o la compañía estrella de un dip o, incluso, pueden ser el ingrediente principal de recetas que se convierten en el plato fuerte de la noche, como las ideas que te vamos a mostrar en este artículo:
¿Cuántos amantes del atún? Este ingrediente nos salva de apuros y en esta oportunidad lo acompañaremos con otros tres elementos que nos harán suspirar.
Coloca el queso crema en un recipiente, añade el atún y mezcla. Sigue haciéndolo hasta obtener la textura deseada. Añade la cebolla previamente picada y sigue revolviendo.
Refrigera la preparación por una hora y luego sirve en un recipiente. Pon en un plato y coloca alrededor las galletas Ducales. ¡Listo, a disfrutar!
Las salchichas, al igual que las Ducales, son perfectas para cualquier momento del día: para el desayuno, para picar en el almuerzo o para ser el plato fuerte de la noche, como este plato que te vamos a explicar a continuación.
Con un rodillo aplanamos el pan tajado y ponemos encima el queso mozarella. Atravesamos la salchicha con un palito de pincho para que quede mucho más fácil cocinarla. Luego, la ponemos en el centro del pan y la envolvemos hasta que quede cubierta.
Por otra parte, ponemos en una bolsa ziploc las galletas Ducales y las trituramos, de manera que queden migas uniformes, pero ten cuidado, no queremos que quede polvo. Este es el paso más divertido para todo Ducalover.
Ahora ponemos un huevo en un plato, lo revolvemos y remojamos toda la salchicha con el pan, para luego pasarla por las galletas trituradas. Ponemos a sofreír la salchicha cubierta de magia, el truco es que quede tan dorada como las Ducales… ¡ya está lista para disfrutar!
Ahora es momento de hacer una combinación que pocos se imaginan, pero que queda deliciosa: Ducales con maíz dulce, juntos en un souffle, plato ligero que proviene del francés y que significa “soplado”. Pero este será diferente, porque tiene el ingrediente secreto, (guiño, guiño).
Precalentamos el horno a 180 °C, y trituramos las galletas Ducales hasta obtener migas uniformes; las ponemos junto al queso parmesano en un molde mediano, previamente engrasado.
Ahora licuamos ¾ parte del maíz, las cebollas cabezonas, la crema de leche, la pimienta y sal al gusto; la idea es obtener una consistencia muy cremosa.
Por otra parte, batimos los huevos ligeramente y los agregamos a la mezcla con la parte que nos falta del maíz más el queso cheddar. Revolvemos muy bien y vertemos en el molde.
Horneamos por media hora, hasta que tome el color dorado que tanto nos encanta. Cuando el palillo salga limpio, es porque pasó la prueba de cocción y ya sabes que es momento de servir. ¡Disfrútalo!
El antipasto es la entrada favorita de muchos por su delicioso sabor. Es proveniente de Italia pero en Colombia lo servimos mucho mejor: ¡con la magia de Ducales!
Picamos y sofreímos las cebollitas, los pimentones y el ajo; es necesario hacerlo a una temperatura media – baja para que no se quemen.
Luego añadimos el resto de ingredientes, previamente cortados, y dejamos cocinar por 15 minutos.
¡Listo! Ahora abrimos el paquete de Ducales y empezamos a deleitarnos con esta mágica y deliciosa combinación.
Probablemente ya has comido pollo apanado, pero estamos seguros que no con Ducales. Sí, sabemos que ahora tendrás una forma favorita de preparar este tipo de carne, convirtiéndolo en tu plato estrella; estamos convencidos de que todos te pedirán el ingrediente secreto.
Partimos la pechuga de pollo en la mitad y aplanamos los filetes con un rodillo. Echamos pimienta al gusto. Luego batimos los dos huevos en un plato y añadimos un poco de leche. En otro plato trituramos de manera uniforme las Ducales y pasamos la pechuga de pollo por el huevo y por las Ducales trituradas, para luego freír en abundante aceite.
¿Te habías imaginado un pollo con el toque secreto de las Ducales? ¡Es muy fácil de hacer! Ahora prepáralo y cuéntanos qué tal te sabe.
¿Te gustaron estas recetas? Las Ducales son el toque secreto de muchas preparaciones, las cuales puedes conocer nuestras deliciosas recetas saladas. Prepáralas y comparte el resultado final en nuestras redes sociales.
Ver todas